En Vigo, el juicio por el alijo de 3,8 toneladas de cocaína transportadas en el buque MV Karar durante la pandemia de Covid ha comenzado en la Audiencia Provincial de Pontevedra. Las defensas han cuestionado la investigación policial y han planteado dudas sobre la validez de algunas diligencias, alegando violaciones de derechos fundamentales de los implicados.
En el banquillo se encuentran los 28 acusados, incluido Juan Carlos Santórum, señalado como el líder del grupo, así como los tripulantes del barco y otras personas arrestadas en tierra. Durante la primera sesión, varias defensas solicitaron la suspensión del juicio argumentando la competencia de la Audiencia Nacional, petición que fue denegada por el tribunal.
La defensa de Santórum y otros encausados ha cuestionado la investigación policial, argumentando que se basó en indicios débiles y solicitando la nulidad de las actuaciones por presuntas violaciones de derechos fundamentales. También se ha expresado preocupación por la implicación de un exjefe policial en el caso, actualmente investigado por posibles vínculos con el narcotráfico.
La Fiscalía acusa a los encausados de preparar y transportar la droga intervenida en alta mar, con penas solicitadas que van desde años de prisión hasta multas millonarias. Destaca el caso del funcionario de Vigilancia Aduanera y su esposa, a quienes se les imputa también un delito de blanqueo de capitales.
A pesar de que algunos acusados llevan cuatro años en prisión preventiva, la ley limita este periodo y es probable que sean liberados antes de que se dicte sentencia.
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