El panorama político en Galicia se intensifica tras las recientes revelaciones sobre una denuncia de agresión sexual que involucra a un exalto cargo del gobierno regional. Este viernes, el PSdeG ha expresado su profundo descontento con las acciones del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, quien, según la crítica, actuó con pasividad ante la situación que denuncia la conocida presentadora Paloma Lago.

Durante su intervención en la 47ª Semana Verde de Galicia, Lara Méndez, secretaria de Organización de los socialistas gallegos, cuestionó fuertemente la tardanza en la dimisión del exconselleiro Alfonso Villares. Méndez reveló que Rueda estaba al tanto de la denuncia desde febrero, y aún así, decidió mantenerlo en su cargo, permitiéndole participar en actividades oficiales de la Xunta. Este comportamiento ha sido visto como un claro desprecio hacia la gravedad de la denuncia y hacia la persona que la formuló.

La portavoz socialista subrayó que, aunque se debe respetar la presunción de inocencia, también es vital honrar el derecho de la víctima a ser escuchada y protegida. Lamentó que el silencio de la administración hacia Lago fue ensombrecido por la desafortunada filtración de su identidad, lo que provocó un re-victimizamiento de aquellos que ya han sufrido en silencio violencia de este tipo.

Méndez enfatizó la urgencia de tomar acciones concretas ante tales situaciones, subrayando que el machismo institucional no puede ser tolerado. “Cuando se tiene conocimiento de una denuncia, es necesario actuar de inmediato”, afirmó, recordando que la falta de respuesta de Rueda es inaceptable.

Además, la nueva conselleira do Mar, Marta Villaverde, enfrentó críticas por su toma de posesión, que fue considerada más como un homenaje al exconselleiro que como una declaración de compromiso claro contra la violencia de género. Mejía reiteró la ausencia de apoyo verbal por parte de la Xunta hacia la denunciante, lo que refleja una falta de sensibilidad ante la cuestión.