El 3 de junio, Monseñor Francisco Prieto ha tomado posesión como nuevo arzobispo de Santiago de Compostela en una ceremonia celebrada en la Catedral de Santiago. En su discurso, ha defendido una Iglesia "humilde y testimonial, pero no acomplejada". Ha destacado la importancia de no preocuparse por el número de seguidores, sino por ser significativos en la sociedad. También ha reconocido la "cultura y lengua propia" de la archidiócesis y ha tenido palabras de gratitud para su predecesor, Julián Barrio.

En la ceremonia, estuvieron presentes el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda; el presidente del Parlamento, Miguel Ángel Santalices; el rector de la USC, Antonio López; y el teniente de alcalde en funciones de Santiago, Sindo Guinarte; además de representantes de las diferentes fuerzas de seguridad del Estado.

Con las Letras Apostólicas del Papa Francisco, se proclamó al nuevo Arzobispo al Consejo de la Archidiócesis mientras los asistentes aplaudían y felicitaban al prelado. Tras cumplir con el tradicional abrazo al Apóstol Santiago, Prieto ha pronunciado su homilía, en la que ha abogado por desechar una actitud de "avasallamiento y provocativa en exceso" y por seguir construyendo espacios de convivencia y humanidad.

Para finalizar, Prieto ha pedido la ayuda de los presentes para "ser bispo de todos, presidiendo en el servicio, sin restricciones ni pertenencias". Ha concluido su discurso destacando la importancia de aprender la gramática de la simplicidad y comprometerse en los tiempos de oportunidad y de ponerse a trabajar.