Organizaciones agrarias y sindicatos demandan medidas urgente por la falta de agua en Galicia y piden investigaciones para abordar un problema que se espera que empeore. A pesar de los cambios de temperatura y la falta de precipitaciones, destacan que ha habido buenas cosechas este año, aunque reconocen la repercusión de estos fenómenos en la aparición de plagas.

El presidente de la Asociación Agraria de Galicia (Asaga), Francisco Bello, afirma que, en general, no ha habido problemas con las cosechas. Destaca el rendimiento espectacular del maíz y menciona también los buenos resultados en el viñedo y el forraje. No obstante, reconoce que la falta de lluvias ha afectado a la ganadería extensiva y señala problemas localizados en el caso de las patatas debido a la aparición de hongos.

El Sindicato Labrego Galego (SLG) coincide en que la cosecha de maíz ha sido muy buena, beneficiada por las lluvias de principios de septiembre. Sin embargo, advierten sobre la transmisión de virus como el de la lengua azul o la enfermedad hemorrágica bovina debido al verano prolongado. También señalan que las granjas extensivas han sufrido más por la falta de pasto y la sequía, lo que ha llevado a problemas para dar de beber al ganado.

Santiago Cid, responsable de sectores vegetales, destaca que la situación varía mucho de unas zonas a otras, pero recalca que hay lugares donde ya hay problemas serios con el agua. Por ello, demanda líneas de ayuda específicas para el almacenamiento y mejora de los sistemas de riego.

Representantes del sector vinícola también hacen hincapié en los impactos de la falta de agua. Carlos Basalo, de Unións Agrarias, afirma que el estrés hídrico en las plantas ha llevado a adelantar la recogida de la uva y se han tenido que ubicar los viñedos en zonas más altas para evitar temperaturas extremas. Además, coinciden en que las condiciones climáticas afectan a la presencia de plagas y advierten que el cultivo del agua estará comprometido por el cambio climático y nuevas plagas.

En resumen, las organizaciones agrarias y sindicatos urgen la adopción de medidas urgentes para abordar la falta de agua en Galicia y solicitan investigaciones adicionales sobre el tema. A pesar de las dificultades, destacan buenas cosechas en general, pero enfatizan en la repercusión en plagas y enfermedades. Demandan apoyo específico para el almacenamiento y mejora de los sistemas de riego, y advierten que el futuro del cultivo del agua estará comprometido debido al cambio climático y plagas emergentes.