En Galicia, la controversia se intensifica en torno a un presunto "plan oculto" del Gobierno central que, según el Partido Popular, apunta a debilitar a la Guardia Civil. Este partido ha manifestado su inquietud al afirmar que el presidente Pedro Sánchez parece más interesado en su propia seguridad que en proteger a quienes velan por la seguridad pública.

En este escenario, Paula Prado, secretaria general del PP de Galicia, se ha reunido con representantes de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) para expresar su preocupación ante lo que consideran un ataque a la seguridad de los ciudadanos. Prado ha subrayado que los recientes recortes impuestos por el Gobierno están afectando gravemente la operatividad de las fuerzas de seguridad en la región.

La cantidad de guardias civiles en Galicia ha descendido drásticamente, con más de mil efectivos ausentes a diario, lo que Prado atribuye a la falta de reclutamiento y al cierre de cuarteles en zonas rurales. Además, ha destacado que la atención presencial se está reduciendo, lo que, a su juicio, convierte la seguridad en un servicio cada vez más digitalizado, lejos de la proximidad que la ciudadanía demanda.

Prado también ha señalado una creciente desconfianza hacia el Gobierno central, que, según ella, ha ejercido presiones sobre organismos como la Unidad Central Operativa (UCO) en un intento de deslegitimar su labor y su defensa de la democracia frente a la corrupción. Este tipo de ataques, sostiene, son perjudiciales para la integridad de las instituciones.

Diego Madrazo, representante de la AUGC en Galicia, ha añadido que el apoyo de la diputada y del PP es especialmente necesario en un momento en que la UCO carece del respaldo tanto de la Secretaría de Estado de Seguridad como del Ministerio del Interior. Este hecho, lamenta, pone en evidencia la falta de compromiso del Gobierno con la lucha contra la corrupción y la protección de la democracia.