SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 de enero.

Las concejalas del PSOE en Santiago, Mercedes Rosón, Mila Castro y Marta Álvarez, han alzado la voz en defensa de su compañero, el hasta ahora portavoz del grupo municipal socialista, Gonzalo Muíños. Estas representantes han declarado que la reunión convocada por el edil Gumersindo Guinarte, con el objetivo de discutir el cambio en la portavocía designado por la dirección local, carecía de validez legal, lo que, según ellas, significa que no han infringido ninguna norma del partido.

A partir de la información a la que ha tenido acceso Europa Press, se ha sabido que las concejalas expresaron su desacuerdo con la convocatoria de Guinarte, dejándose claro que no asistirían a la reunión por considerarla nula desde su origen.

Un punto crucial que han destacado es la ausencia del propio Muíños en dicha convocatoria. Ellas enfatizan que su falta de inclusión es un grave error, ya que este sigue siendo, afirman, "un miembro integrante de pleno derecho del grupo".

Las concejalas han hecho hincapié en que el expediente que se encuentra sobre la mesa, relativo a Muíños, todavía no tiene carácter definitivo. Recuerdan que su compañero ha manifestado su intención de recurrir cualquier decisión que considere injusta, asegurando su “derecho a defensa”.

Además, subrayaron que el resultado del expediente disciplinario en cuestión no incluyó la expulsión del partido. Este hecho es fundamental, ya que la expulsión sería la única circunstancia que podría conllevar la pérdida de la condición de concejal adscrito al grupo, obligación que, según afirman, Muíños aún cumple.

Las concejalas argumentan que la falta de convocatoria de Muíños compromete la posibilidad de llevar a cabo la reunión y, por ende, la validez de cualquier decisión que se pudiera tomar en ella. Por estas razones, decidieron notificar a Guinarte su decisión de no asistir a la reunión programada para el lunes a las 13:30 horas, además de anunciar una eventual impugnación de cualquier acuerdo que pudiera surgir de dicho encuentro.

Esta situación se complica aún más después de que las concejalas hicieran una aparición en conjunto con Muíños durante una rueda de prensa, donde no solo reafirmaron su apoyo, sino que también denunciaron presiones ejercidas por la dirección local del PSOE. Según ellas, estas presiones estarían destinadas a forzar la dimisión de uno de los concejales del grupo, con el fin de otorgar un hueco en la corporación al secretario xeral local, Aitor Bouza.

Por último, es importante señalar que el mismo martes, la dirección del PSOE en A Coruña envió un informe a Ferraz, donde se sugiere la posibilidad de tomar nuevas medidas que podrían concluir en la "expulsión inmediata" de las concejalas, al considerar que continúan desafiando las normas del partido.