Un incendio forestal ha dejado huella en Brantuas, Ponteceso, donde en menos de una semana el fuego ha devorado unas 600 hectáreas, aunque las autoridades aseguran que la situación está bajo control.

Desde Santiago de Compostela, el 7 de agosto, se ha informado que el incendio que estalló el miércoles por la noche en As Pontes de García Rodríguez ha sido estabilizado a partir de las 13.34 horas del jueves, según ha señalado la Consellería de Medio Rural.

El foco de incendio se inició en O Freixo a las 22.03 horas y, de acuerdo a las últimas cifras, ya afecta a unas 20 hectáreas. Para su extinción se han movilizado fuerzas compuestas por siete agentes, 11 brigadas, ocho motobombas, una pala y un helicóptero, reflejando la rápida respuesta de los servicios de emergencias.

María Rivas, subdelegada del Gobierno en A Coruña, ha declarado que están listos para activar "todos los medios" del Gobierno si fuera necesario y ha mencionado que la Guardia Civil está completamente operativa para ofrecer apoyo en la situación actual, asegurando que, hasta el momento, no se han visto implicadas viviendas.

En cuanto a la posible causa intencionada de estos incendios, Rivas ha señalado que la investigación continúa en curso, al igual que lo indicado sobre los incendios en Camariñas y Ponteceso, enfatizando que "la ley debe castigar con severidad a quien sea responsable de estos actos".

Si bien el incendio de Brantuas ha sido controlado, ha experimentado una pequeña reactivación tras ser estabilizado originalmente el domingo. Según el alcalde José Manuel Mato, la situación no es alarmante, y los equipos continúan trabajando para extinguir cualquier vestigio del fuego.

El día miércoles también se registró una reactivación en el incendio después de que este fuera considerado estabilizado, y se estima que ha pasado de 170 hectáreas a las 200 actuales, reflejando la persistente amenaza del fuego en la región.

Mientras tanto, en Corme Aldea, la Xunta y la Guardia Civil están colaborando en las labores de contrafuego para proteger un área donde un incendio ha arrasado 60 hectáreas. Este esfuerzo busca prevenir nuevas llamas en una zona ya afectada por la devastación.

La localidad de Ponteceso ha padecido múltiples fuegos desde el pasado sábado, que han consumido cerca de 600 hectáreas en total, destacándose cuatro focos por su magnitud. Dos de ellos, situados en las parroquias de Cospindo y A Graña, ya han sido extinguidos.

En este momento, los fuegos de Brantuas y Corme Aldea continúan bajo control, con un monitoreo constante por parte de las autoridades, que se esfuerzan por mitigar el impacto de esta crisis forestal.