El 18 de agosto, en la localidad de Ourense, un hombre de 61 años fue detenido por la Guardia Civil como presunto responsable de un incendio en la zona de O Seixo, en O Bolo. Sin embargo, tras ser presentado ante el juzgado de A Pobra de Trives, ha recuperado su libertad, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.

El tribunal le ha permitido salir en calidad de investigado por un presunto delito de incendio forestal, pero le ha impuesto la obligación de acudir a firmar los días 1 y 15 de cada mes, lo que significa que su situación legal seguirá bajo supervisión mientras se desarrollan las investigaciones.

La detención y posterior traslado del hombre provocaron una notable respuesta por parte de la comunidad de Petín, que se movilizó en su apoyo. Este lunes, más de 150 vecinos, junto con la alcaldesa del municipio, se desplazaron a Trives para expresar su solidaridad, alegando que la detención fue "injusta" y que su vecino representa un "chivo expiatorio" en todo este contexto.

Los residentes de Petín criticaron la decisión de apresar a alguien que, según ellos, ha sido un pilar fundamental en la lucha contra el fuego. Afirmaron que "se está deteniendo a quienes realmente permanecieron en los pueblos para salvar lo poco que se podía", y enfatizaron que "los auténticos responsables parecen buscar a un culpable y no lo permitiremos".

Un portavoz de la comunidad declaró a Europa Press que el detenido era en realidad un voluntario comprometido, que había actuado de manera responsable al encender fuegos controlados como medida de prevención, con el objetivo de proteger al pueblo gracias a su experiencia en el manejo de incendios.