El pasado domingo, Santiago de Compostela se convirtió en el epicentro de una multitudinaria movilización en la que miles de ciudadanos expresaron su preocupación por el futuro de los montes gallegos. La manifestación surge como respuesta a la devastadora oleada de incendios registrada en agosto, que dejó a su paso una estela de destrucción en extensas áreas, especialmente en la provincia de Ourense.

Con el lema "Lumes nunca máis" resonando en numerosas pancartas, la marcha partió hacia las 12:00 horas desde la Alameda, dirigiéndose a la emblemática Praza da Quintana, donde los asistentes se reunieron para escuchar un manifiesto que clama por un cambio en la política forestal actual.

Belén Rodríguez, portavoz de la plataforma "Por un Monte Galego con Futuro", enfatizó en su discurso la necesidad de promover un ecosistema "vivo y con futuro". Acorde a su visión, es imprescindible concebir los montes de manera multifuncional, garantizando espacios donde las comunidades puedan desarrollarse con calidad de vida.

Las críticas hacia la gestión de la Xunta de Galicia fueron contundentes, con Rodríguez demandando medidas concretas que enfrenten los retos que plantea el cambio climático. La multitud respondió con coreografías de protesta y consignas incisivas, como “Rueda, dimisión” o “E a culpa de quen é? Dos que botan ao PP”, incrementando la presión sobre los líderes regionales para que tomen acción efectiva en la protección del medio ambiente.