La situación de los incendios en Galicia se vuelve cada día más crítica, con Chandrexa a la cabeza, donde un fuego descontrolado ha consumido 9.500 hectáreas en apenas una semana. Este incendio, que comenzó el 7 de agosto en la parroquia de Requeixo, se enfrenta a condiciones meteorológicas adversas y complicaciones en los accesos, lo que ha puesto en jaque a los equipos de extinción. En los últimos días, la emergencia se ha extendido, provocando que la superficie arrasada alcance las 22.000 hectáreas en toda la provincia de Ourense.

En el último balance ofrecido por la Consellería do Medio Rural, se han reportado un total de siete incendios activos en Ourense, destacando cuatro que se consideran grandes fuegos. El incendio de Chandrexa no está solo, ya que un segundo fuego surgió el 12 de agosto en la misma área, en la parroquia de Parafita, arrasando otras 5.000 hectáreas en un corto periodo de tiempo.

Los incendios de Chandrexa, acumulando un total de 9.500 hectáreas devastadas, se acercan a los récords históricos de incendios en Galicia, como los ocurridos en julio de 2022 que quemaron más de 10.500 hectáreas. Junto a Chandrexa, el fuego en Oímbra ha provocado heridas por quemaduras en tres brigadistas y ha arrasado 5.000 hectáreas; le siguen los incendios en A Mezquita y Maceda, que han perdido 4.000 y 1.700 hectáreas, respectivamente.

A pesar de la magnitud de la catástrofe, la Consellería ha informado que algunos fuegos están estabilizados, aunque aún fuera de control, como en Maceda y en otras parroquias de la provincia, donde las hectáreas arrasadas se suman a un oscuro verano ya marcado por más de 25.000 hectáreas devastadas en toda Galicia.

Como medida de precaución, se han tomado decisiones drásticas: cuatro núcleos poblacionales en el municipio de Monterrei han sido confinados, y un total de 27 residentes de Albarellos han sido evacuados, junto a otros 47 mayores de una residencia en A Mezquita. La comunidad se encuentra en un estado de alerta que pone de manifiesto la urgencia de abordar la crisis medioambiental que se cierne sobre la región.