La ola de calor disminuye en Galicia: 74 municipios aún bajo alerta naranja y se prohíben actividades deportivas.

Las altas temperaturas continúan azotando Galicia, donde el calor se hace sentir especialmente en el interior de la comunidad. Según datos recientes, el clima cálido no da tregua, y los termómetros se registran nuevamente en cifras elevadas.
En un esfuerzo por mitigar los efectos del calor extremo, la Xunta ha declarado el nivel naranja en 74 municipios gallegos, concentrados principalmente en las áreas isoclimáticas de Ourense y Pontevedra. Esta medida se fundamenta en el plan de actuación dispuesto por las autoridades para proteger la salud de los ciudadanos ante las inclemencias del tiempo.
Como resultado de esta alerta, se ha decidido suspender toda actividad deportiva federada en los municipios afectados a lo largo de la jornada. Esta cifra es un alivio en comparación con los 90 municipios que enfrentaron la misma suspensión el martes pasado. En distintas localidades del interior de A Coruña, la advertencia se mantiene en nivel amarillo.
Meteogalicia ha indicado que el aire cálido se queda en Galicia, trayendo consigo temperaturas elevadas en el interior, mientras que las costas experimentan un ligero alivio gracias a la llegada de la niebla.
La decisión de la Xunta afecta directamente a las actividades deportivas en las cinco zonas donde se han declarado alertas naranjas, aunque las actividades acuáticas están permitidas. Sin embargo, hay una advertencia específica para evitar estas actividades durante las horas más calurosas del día, entre 12:00 y 17:00 horas.
En la parte noroeste de Ourense, varios municipios, incluidos Amoeiro, Avión y O Carballiño, están bajo esta restricción. En el Miño, localidades como Ourense, Barbadás y Ribadavia también enfrentan estas medidas. En total, son 74 las comunidades que se encuentran en alerta, afectando a un amplio rango de poblaciones gallegas.
Asimismo, los municipios en la montaña de Ourense y Valdeorras no escapan a las medidas preventivas, sumándose a localidades como O Bolo y O Barco de Valdeorras, que ahora tienen que cumplir con las restricciones establecidas.
Las autoridades sanitarias han emitido recomendaciones esenciales para la población, subrayando la importancia de mantenerse hidratado y cuidar la alimentación. Se sugiere aumentar la ingesta de líquidos, priorizando agua y zumos fríos, y evitando bebidas alcohólicas y comidas pesadas.
Además, el uso de ropa ligera, mantenido en espacios frescos y ventilados, es vital. Las autoridades instan a no dejar a niños ni ancianos en vehículos cerrados y a adaptar los hábitos diarios para minimizar el riesgo de golpe de calor, advirtiendo a la sociedad sobre la importancia de buscar atención médica si se sienten mareos o signos de agotamiento.
En cuanto a las alertas meteorológicas, la zona del Miño en Ourense se encuentra bajo aviso naranja debido a las altas temperaturas, con probables máximas que podrían alcanzar los 39º C entre las 13:00 y las 21:00 horas. Además, otras áreas de Galicia se mantienen en alerta amarilla, donde se esperan máximas de hasta 36º C.
De este modo, se extiende la alerta también a partes del interior de Pontevedra, donde las temperaturas podrían sobrepasar los 34º C, reclamando así un llamado a la acción y precaución ante el persistente calor que azota a la región.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.