Este 29 de julio, la localidad lucense de Carballedo se ha visto asediada por incendios forestales, destacando el siniestro que ha afectado a la parroquia de San Mamede de Lousada, donde las llamas han arrasado más de 20 hectáreas de terreno.

Por otro lado, un reciente informe de la Consellería de Medio Rural indica que el incendio en la parroquia de Xil, situada en el municipio pontevedrés de Meaño, ha devastado ya 60 hectáreas de bosque, aunque las autoridades de extinción consideran que la situación está bajo control tras los esfuerzos realizados.

La situación de emergencia se mantiene en el incendio forestal que afecta al municipio pontevedrés de Arbo, en el cual se ha declarado la fase 2 debido a la cercanía del fuego a comunidades residenciales como O Pedreiro y O Urzal, lo que ha generado gran preocupación entre los vecinos.

En un desarrollo más positivo, el incendio que habia generado mayor inquietud en la jornada anterior, en la parroquia de Pesqueiras, dentro del municipio de Salvaterra de Miño, ya se encuentra controlado después de haber consumido 47 hectáreas de vegetación forestal.

El día de hoy ha resultado particularmente complicado en Galicia, marcado por temperaturas elevadas y rachas de viento que han contribuido a la propagación de varios fuegos en áreas como Camariñas (A Coruña) y Sanxenxo (Pontevedra), afectando incluso el tráfico en esas regiones.

Un incendio de origen agrícola, también fue sofocado en Cerdedo-Cotobade, en la parroquia de San Xurxo de Sacos. Sin embargo, otro incendio forestal ha surgido en Tenorio, en la misma localidad, aunque este ya se encuentra controlado. Ambos siniestros obligaron a evacuar a aproximadamente 30 residentes de cinco viviendas cercanas.

Además, otros focos de incendio se han reportado en Vincios, perteneciente al municipio de Gondomar (Pontevedra), así como en Quiroga (Lugo), y en la provincia de Ourense, donde las llamas han asolado zonas de Carballeda de Avia y Vilardevós, entre otros puntos críticos.