VIGO, 9 de diciembre. En un caso que ha conmocionado a la comunidad, un hombre ha acordado aceptar una pena de tres años de prisión tras confesar ser el autor de un delito continuado de agresión sexual contra una menor, con quien compartió hogar durante varios años en el partido judicial de Vigo.

Este acuerdo se alcanzó durante una vista de conformidad realizada en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ubicada en la ciudad de Vigo. Luis Salvador G.P. reconoció los hechos por los cuales la Fiscalía y la madre de la joven presentaron cargos en su contra.

Dada la admisión de culpabilidad por parte del acusado, no fue necesaria la presentación de pruebas adicionales, y el tribunal emitió una sentencia que se considera firme debido a la aceptación de las partes involucradas.

El sujeto, Luis Salvador G.P., admitió haber llevado a cabo agresiones sexuales continuadas contra la menor, quien era menor de 16 años en el momento de los delitos. Compartía con ella un vínculo de parentesco, y los abusos se llevaron a cabo con penetración vaginal de manera reiterada entre los años 2016 y 2019, llegando a suceder "hasta cuatro veces por semana", tal como se detalla en la acusación pública.

Durante ese periodo, el acusado era conocido por su consumo excesivo de alcohol, lo que afectaba notablemente su capacidad para tomar decisiones. Para la fecha de la vista de conformidad, ya había abonado más de la mitad de la indemnización que se había solicitado; esta cantidad será entregada a la madre de la víctima, quien lamentablemente falleció en 2021 por causas no relacionadas con este caso.

Por todos estos motivos, la Audiencia ha condenado a Luis Salvador G.P. como autor de un delito continuado de agresión sexual con penetración vaginal sobre una menor de 16 años. La sentencia le impone tres años de cárcel, a pesar de que la Fiscalía solicitó inicialmente una pena de 12 años. Además, deberá cumplir siete años de libertad vigilada una vez finalizada su condena privativa de libertad, perder la patria potestad y será inhabilitado para ejercer cualquier oficio que implique contacto con menores durante un período de 18 años.

Asimismo, se ha determinado una responsabilidad civil que incluye una indemnización de 18.000 euros, de la cual el procesado ya ha consignado más de 9.000 euros. La sentencia ha tenido en cuenta las atenuantes por el daño reparado y el abuso de alcohol del acusado.