El pasado miércoles, un incidente en el aeropuerto de Santiago de Compostela puso de relieve una grave deficiencia en los servicios médicos de la instalación, cuando un niño tuvo que ser evacuado de un avión debido a problemas respiratorios. La situación se complicó aún más ya que no había personal médico disponible para atender la emergencia, obligando a la madre del menor a recurrir a un taxi para llevarlo al hospital.

Este suceso ha generado una fuerte crítica por parte de Roberto Rivas, representante del sector aéreo de UGT en Galicia, quien ha expresado su indignación ante la falta de atención médica permanente en un aeropuerto que opera las 24 horas del día. Rivas subrayó que este tipo de emergencias pone en peligro la salud de los pasajeros, especialmente de aquellos más vulnerables, como los niños.

El niño, que viajaba en un vuelo con destino a Las Palmas de Gran Canaria, se encontraba en el proceso de rodaje del avión cuando comenzó a tener dificultades para respirar, lo que llevó a la tripulación a tomar la decisión de regresar al estacionamiento del aeródromo. Sin embargo, al no contar con una ambulancia lista y disponible, el tiempo de espera para recibir atención médica se elevaba a aproximadamente media hora, lo cual es inaceptable en situaciones críticas.

Rivas afirmó que es "una auténtica vergüenza" que en una instalación de tal envergadura no se cuente con un servicio médico constante y accesible. Esta situación no solo resalta la necesidad de mejoras en la infraestructura del aeropuerto, sino que también genera un llamado urgente a las autoridades para que se implementen medidas que garanticen la seguridad y bienestar de todos los viajeros.