El líder de Vox, Santiago Abascal, ha criticado a la presidenta del Partido Popular en Extremadura, María Guardiola, por sus comentarios tras las elecciones municipales del 28 de mayo. Abascal ha asegurado que la líder del PP insultó a su partido y afirmó que estaban "obligados a entregar su voto". En un acto de precampaña en A Coruña, Abascal ha subrayado que cualquier partido que quiera pactar con Vox debe respetar la fuerza decisiva que tienen en Extremadura.

Después de días de negociaciones, Guardiola descartó gobernar con Vox en la comunidad autónoma debido a discrepancias ideológicas. Vox reclama una presencia en el gobierno regional, pero el PP justifica su negativa argumentando que el porcentaje de voto de Vox es menor que en la Comunidad Valenciana, donde sí han alcanzado un pacto de gobierno.

A pesar de esto, la presidenta del PP de Extremadura ha admitido en una carta a sus militantes que el diálogo con Vox es imprescindible para alcanzar un pacto para el gobierno regional y ha abogado por seguir hablando sin renunciar a formar parte del Ejecutivo. Abascal ha considerado que en Extremadura ha pasado algo muy sencillo: el PP prometió respetar la lista más votada, que desgraciadamente es la socialista, pero existía una mayoría alternativa entre el Partido Popular y Vox que permitiría desalojar al PSOE del Ejecutivo regional.