En Lugo, a 1 de agosto, se ha hecho un llamado contundente a la acción por parte de José Ramón Gómez Besteiro, secretario general del PSdeG, quien ha exigido la renuncia inmediata de Roberto Barba, director general de Loita Contra a Violencia de Xénero de la Xunta. Esta petición surge a raíz de unas declaraciones “inaceptables” que Barba realizó en respuesta al informe del Consello de Contas sobre las iniciativas de la Xunta en la prevención de la violencia de género entre 2018 y 2022.

Desde el PSdeG, se ha criticado a Barba por sus afirmaciones, en las que, según el partido, se cuestiona la importancia de las estrategias preventivas en relación a los asesinatos machistas y se establece una conexión errónea entre la violencia y el hecho de que las mujeres decidan finalizar relaciones.

Besteiro ha declarado en un evento en Lugo que “la gravedad de estas afirmaciones debería llevar a Barba a dimitir de inmediato”, argumentando que este incidente no es un caso aislado, sino que refleja una creciente tendencia en la Xunta hacia una concepción problemática de la violencia de género.

Además, el líder socialista ha destacado que el informe del Consello de Contas advierte sobre el desmantelamiento progresivo de las políticas públicas dedicadas a la prevención y sensibilización en torno a la violencia machista, lo que podría tener consecuencias devastadoras.

Para ilustrar su preocupación, Besteiro ha señalado que el Gobierno gallego ha dejado sin utilizar más de 10 millones de euros asignados del Pacto de Estado y ha rechazado un 70% de las peticiones de apoyo formuladas por los ayuntamientos en este contexto.

“Mientras el Gobierno central se mantiene firme en su compromiso, la Xunta parece ignorar la realidad. La falta de implicación es evidente. Si el PP no apoya esta lucha, que lo comunique abiertamente”, enfatizó Besteiro con vehemencia.

En relación a un ataque violento reciente, el político socialista manifestó su “condena rotunda” ante la agresión sexual sufrida por una joven en Ferrol, demandando a la justicia que actúe con determinación en este caso.

Finalmente, ha instado a poner fin al “negacionismo” que, según su análisis, se está arraigando en las instituciones gallegas y ha pedido un “cambio de dirección” en la gestión de la violencia de género en la región.