En una muestra de lealtad hacia la ciudad y los principios defendidos por el PSOE en España, los seis concejales del partido en Santiago de Compostela han desafiado las directrices locales y han votado a favor de una medida en el pleno municipal que ha salido adelante este lunes.

Mercedes Rosón, concejala socialista, expresó que la decisión de apoyar la medida es un acto de lealtad y coherencia con lo que defiende el PSOE a nivel nacional y regional.

El portavoz municipal, Gonzalo Muíños, también destacó la importancia de poner los intereses de la ciudad por encima de todo y no ceder a presiones políticas.

Esta división interna ha generado una ruptura total entre la dirección local del partido y el grupo municipal conformado por los seis concejales rebeldes.

Estos seis ediles podrían enfrentar medidas disciplinarias por parte del partido, incluyendo sanciones o expulsiones.

La fractura generada este lunes abre un escenario inédito en el que la dirección del PSOE deberá decidir cómo proceder contra los concejales desobedientes.

El reglamento interno del partido establece que los grupos municipales deben acatar las resoluciones y acuerdos políticos establecidos por los órganos de dirección correspondientes.

En declaraciones previas al pleno, la vicesecretaria general del PSOE compostelano defendió la postura del partido respecto a la regulación de las viviendas de uso turístico en la ciudad.

Tras el pleno, está prevista una reunión de la ejecutiva local del PSOE para abordar cambios en puestos de personal de confianza, una decisión que no está directamente relacionada con la votación en cuestión.