El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, continúa con la reforma del Gobierno autonómico introduciendo nuevos cambios en el segundo nivel de la Administración. Una de las novedades más destacadas es la transferencia de las delegaciones territoriales, que antes estaban bajo la supervisión de la Consellería dirigida por Diego Calvo, para que pasen a depender directamente de Presidencia.

Además, Calvo asumirá la gestión de un nuevo departamento ligado a la Consellería de Presidencia: la Dirección Xeral de Movilidade, donde Rueda concentrará varias competencias que estaban dispersas hasta ahora.

En lo que respecta a los delegados territoriales, Rueda ha realizado dos cambios significativos en comparación con el mandato anterior. Belén do Campo regresa como titular de la Delegación de A Coruña, mientras que Manuel Pardo asume el cargo en Ourense. Por otro lado, Gabriel Alén estará al frente de la Dirección Xeral de Comercio e Consumo.

Además, Rueda ha nombrado a una letrada de la Xunta, Isabel Concheiro, para uno de los cargos de nueva creación anunciados durante el debate de investidura.

En cuanto a los ceses, Silvia Valdés dejará la Secretaría Xeral de Medios a su propia solicitud, siendo reemplazada por Pedro Rojo. Rueda ha elogiado la labor de Valdés, agradeciéndole su dedicación y trabajo.

Rueda ha decidido reorganizar otros departamentos y crear nuevas direcciones xerais, como la separación de la Secretaría Xeral de Igualdade en dos direcciones específicas: una para la promoción de la igualdad y otra centrada en combatir la violencia machista.

En el ámbito de los nombramientos, se han producido múltiples cambios en la Consellería de Facenda, entre otros departamentos. Rueda ha anunciado que la próxima semana se completarán los cargos del segundo escalafón durante el próximo Consello de la Xunta.