El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha manifestado su satisfacción por la confirmación del Gobierno central sobre la fecha y el lugar de la próxima Conferencia de Presidentes, programada para el 13 de diciembre en Santander. Considera que los temas a tratar son "relevantes" y subraya la importancia de aprovechar esta oportunidad para reclamar un modelo de financiación que sea “justo”. En este sentido, se opone a la propuesta del cupo catalán, así como a la posibilidad de extender esta medida al resto del territorio español.

Tras concluir la reunión del Ejecutivo autonómico, Rueda ha resaltado que fue un proceso complicado para el presidente español, Pedro Sánchez, quien se resistió durante un tiempo prolongado a convocar esta reunión. Sin embargo, el mandatario gallego ha observado que finalmente honró su "obligación" de reunir a los presidentes autonómicos. "Es claro que el presidente no lo deseaba, pero las comunidades, incluidas aquellas que no están gobernadas por el PP, sí lo anhelaban", ha declarado con determinación.

En cuanto a los temas que se abordarán durante la conferencia, Rueda ha destacado la financiación autonómica, la sanidad, la emigración y la vivienda como cuestiones fundamentales. Ha expresado su anhelo de que el encuentro no solo resulte "útil", sino que también sea un punto de partida para alcanzar o delinear "acuerdos", que, aunque puedan desarrollarse en otros espacios, requieren "un diálogo al más alto nivel".

"Voy a acudir con la mejor disposición", ha afirmado el presidente gallego, quien ante la pregunta sobre los temas prioritarios ha insistido en que todos los puntos tratados son cruciales, pero ha puesto la financiación en primera línea. A pesar de que el Gobierno central "inicialmente" no deseaba incluir este asunto en la discusión, Rueda cree que es esencial, dada la complejidad de llegar a un consenso.

Rueda ha advertido que el sistema de cupo propuesto no es favorable para Galicia y ha instado al Gobierno a ser consciente de esto, llevándolo al debate con otros líderes, incluidos aquellos que forman parte del PSOE pero están en la oposición. Además, subrayó la necesidad de adoptar enfoques más coordinados en áreas como la vivienda y la emigración, asegurando que Galicia podría gestionar muchos más fondos de los que actualmente recibe.

El mandatario gallego también ha enfatizado la urgencia de que el Gobierno establezca medidas normativas para abordar, junto a las comunidades autónomas, problemáticas como la escasez de profesionales en el sector sanitario. Ha demandado una "política migratoria coordinada" que facilite el reparto de personas refugiadas provenientes de conflictos como el de Mali.

"Una política migratoria debería ser una estrategia nacional. Las comunidades no podemos actuar solo como receptores de migrantes sin claridad sobre a dónde van a ir", ha advertido, manifestando una vez más su descontento por la falta de un "criterio de distribución" y por la escasa información que recibe la Xunta sobre este asunto.

Reconociendo el esfuerzo del delegado del Gobierno por transmitir información, Rueda ha señalado que el problema radica en el bajo volumen de datos que se les proporciona. "Es imperativo que esto se gestione de forma más ordenada y planificada", ha concluido rotundamente.

Sobre el año de legislatura del Gobierno de Sánchez, Rueda ha sido claro: "El resultado es evidente", ha afirmado, resaltando que solo ha logrado aprobar una ley, que era de interés específico para uno de sus socios. "Todo lo demás permanece en el limbo. Observamos un constante aplazamiento de normas esenciales, disensiones internas, un debilitamiento de los socios de gobierno y chantajes por parte de partidos que solo consideran su propio territorio, afectando a la solidaridad general", ha añadido, apuntando hacia el tema de la financiación y el controvertido cupo catalán sin nombrarlo directamente.

Asimismo, se ha referido a la "pérdida de prestigio internacional" del país, un fenómeno que considera "evidentísimo", y ha mencionado reiteradamente los "crecientes casos de corrupción" cerca del núcleo del Gobierno. En este contexto, su balance es "francamente negativo", extensión que incluye también los "incumplimientos claros" que han afectado a Galicia.

En concreto, Rueda hizo mención a la falta de avance en la transferencia de la gestión del litoral, un asunto que sigue pendiente meses después de que el Tribunal Constitucional validara la legislación gallega al respecto, así como a los "retrasos" en infraestructuras importantes.

En una nota más optimista, el presidente gallego destacó que "por fin" se reunió con Sánchez el pasado septiembre. Sin embargo, criticó que no se asumieron compromisos novedosos y remarcó que los acuerdos pactados hace dos años aún permanecen sin cumplirse, mientras el Gobierno se sostiene en alianzas que cada vez parecen imponer más chantajes, perjudicando así el interés general y, directamente, el bienestar de Galicia.