El hombre de 47 años que supuestamente mató a su padre de un disparo con una escopeta de caza el pasado viernes en Guntín (Lugo) ha sido ingresado en prisión provisional sin fianza. El arrestado, que estuvo ingresado en la unidad de psiquiatría del Hospital Lucus Augusti durante dos días debido a una crisis, compareció este domingo ante el juzgado en funciones de guardia de Lugo.

El acusado, investigado por un delito de homicidio, se abstuvo de hacer declaraciones sobre los eventos ocurridos, según fuentes judiciales. Los hechos tuvieron lugar en la casa familiar que compartía la víctima, de 76 años, con su esposa, el arrestado, su esposa y dos hijos. La víctima falleció debido a las heridas provocadas por el disparo de la escopeta de caza, que estaba registrada a nombre del hijo.

Después de su arresto, el presunto autor del crimen fue trasladado a la Comandancia de la Guardia Civil en Lugo, pero tuvo que ser llevado al Hospital Lucus Augusti debido a un ataque de ansiedad. Según fuentes cercanas a la investigación, el sospechoso permanecía en el centro hospitalario hasta última hora del viernes, a la espera de que los médicos determinaran si era necesario su ingreso en la unidad de psiquiatría.

La Guardia Civil recibió un aviso sobre el incidente y se desplazó hasta el domicilio, ubicado en una zona rural rodeada de propiedades agrícolas. El equipo de psicólogos especializados en intervenciones en sucesos traumáticos también acudió al lugar para brindar apoyo. Durante la tarde, los agentes de la Policía Científica recogieron pruebas tanto dentro como fuera de la vivienda, incluyendo tres escopetas de caza que fueron incautadas, según testigos presenciales.

La alcaldesa de Guntín, María José Gómez, expresó su consternación por lo ocurrido en una familia que describió como "ejemplar". El caso continúa siendo investigado por las autoridades judiciales de Lugo.