José López Campos, conselleiro de Cultura, Lingua e Xuventude, ha manifestado que está abierto a la posibilidad de revisar el Decreto del Plurilingüismo, aunque ha instado al Bloque Nacionalista Galego (BNG) a que presente una alternativa concreta antes de emprender cualquier modificación.
En una rueda de prensa celebrada en Santiago de Compostela el 28 de noviembre, López Campos anunció que el Gobierno gallego tiene la intención de actualizar el Plan Xeral de Normalización Lingüística antes de que finalice el año. Este nuevo plan abarca 11 áreas clave, entre las que se incluyen sectores tan relevantes como las nuevas tecnologías y el ámbito audiovisual.
Las declaraciones del conselleiro se produjeron tras una reunión con los grupos parlamentarios, donde estuvo acompañado por Valentín García, secretario general de Lingua. Esta interacción forma parte de una serie de encuentros entre la administración y los diferentes grupos políticos, con el objetivo de llegar a un nuevo Pacto pola Lingua que beneficie a la comunidad gallega.
López Campos enfatizó el "clima de diálogo" que se está cultivando entre el Gobierno y las formaciones políticas, un aspecto que consideró esencial para la creación de un acuerdo robusto que responda a las necesidades lingüísticas de la sociedad gallega. "He visitado instituciones clave como la Real Academia Galega y el Consello da Cultura, y todos coinciden en que es hora de que la política ofrezca una imagen renovada y abierta al consenso", subrayó.
El conselleiro también mencionó que, considerando los datos sobre el uso del gallego, es fundamental que los partidos políticos den un ejemplo. "Estamos en un momento decisivo. Existe sensibilidad y un diagnóstico común sobre la situación del gallego. Es hora de actualizar nuestras herramientas para promover su uso en la sociedad, y el Plan Xeral de Normalización Lingüística es, sin duda, nuestra principal herramienta", explicó.
Con respecto al futuro del plan, López Campos detalló que la propuesta para los grupos parlamentarios consiste en la creación de un nuevo documento de normalización con 11 grupos de trabajo que abordarán áreas con diferentes impactos, incorporando contribuciones de las distintas formaciones políticas. Esta ampliación de áreas de trabajo es notable, ya que en 2004 se fijaron solo nueve.
El conselleiro expresó su deseo de iniciar este proceso de actualización del plan antes de que acabe el año, aunque aclaró que también se implementarán medidas más urgentes para enfrentar la situación del gallego. En este sentido, presentó un conjunto de 50 propuestas que abarcan diversas áreas de actuación, con un enfoque principal en lo sanitario, educativo y judicial.
Algunas de las propuestas mencionadas incluyen la disponibilidad de documentos en gallego y castellano en centros de salud y hospitales, la recomendación de que el personal se comunique en gallego con los usuarios, y la implementación de microformaciones específicas para cada sector.
López Campos indicó que es imperativo fomentar el uso del gallego desde una perspectiva positiva y constructiva, subrayando que todos tenemos un papel crucial en la mejora del uso social del idioma. "Si bien hay un camino por recorrer, estoy convencido de que, a pesar de las diferencias que puedan existir, estas son mínimas y no deben obstaculizar el diálogo que necesitamos", añadió.
Además, la Xunta y los grupos parlamentarios han acordado mantener encuentros regulares y crear canales de comunicación para el intercambio de ideas y propuestas. En cuanto a las discrepancias en relación a la derogación del Decreto del Plurilingüismo, López Campos destacó que hay muchos aspectos en los que se puede trabajar de manera conjunta.
El conselleiro reconoció las diferencias, pero enfatizó que la mayoría de los puntos en discusión son coincidentes. Si bien se mostró abierto a considerar una modificación del decreto, insisitió en que es la responsabilidad de los grupos que solicitan el cambio presentar una propuesta alternativa concreta, algo que aún no ha sucedido.
"No vamos a entrar en debates semánticos o léxicos sobre la derogación o la modificación. Si el BNG quiere abordar este tema, sería útil que nos ofrecieran una propuesta", declaró, enfatizando que cualquier cambio debe considerar la opinión de la comunidad educativa. "No son cambios sencillos, pero estamos dispuestos a evaluar y estudiar cualquier propuesta que se presente", concluyó López Campos.
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