OURENSE, 27 de noviembre. La Audiencia Provincial de Ourense ha emitido un fallo significativo en un caso que conmocionó a la comunidad, dictando una condena de 22 años y medio de prisión para un individuo que perpetró un ataque violento contra su propio primo, resultando en la muerte de la pareja del primo y graves heridas al propio familiar, hecho ocurrido en febrero de 2021 en el barrio de Velle.

El tribunal determinó que el acusado es culpable de dos delitos de asesinato con alevosía, uno completado y otro intentado. Se tuvo en cuenta la circunstancia atenuante de la alteración psíquica, dado que el condenado padece desde la adolescencia una esquizofrenia paranoide, que ha sido calificada por la misma magistrada en su sentencia.

Los jurados populares han destacado que en la madrugada del 19 de febrero de 2021, el atacante, armado con un cuchillo que tomó de su hogar, habría comunicado a su madre que se dispondía a “matar conejos”, antes de dirigirse al hogar de su primo con intenciones de causar un daño irreparable.

De acuerdo con el relato de los hechos, al llegar a la vivienda familiar, el agresor hirió a su primo tras ser recibido en la puerta. Desde el umbral, lanzó la amenaza de que iba a matarles y luego se abalanzó sobre él, asestándole múltiples puñaladas que le dejaron sin posibilidad de defensa.

En ese crítico momento, la pareja del primo intervino en un intento de detener la violencia, suplicando que el ataque cesara al advertir que su pareja había sido ya herida. Sin embargo, el atacante no mostró ningún indicio de detenerse y, en un acto de desesperante brutalidad, arremetió contra ella propinándole varias puñaladas profundas que resultaron en heridas mortales.

El tribunal también consideró que aunque el estado psicótico del acusado limitó de alguna manera su capacidad para comprender la gravedad de sus acciones, no se aceptaron las apelaciones de la defensa que pedían un trato más benévolo, argumentando que la condición mental del acusado no justificaba una exención total de responsabilidad.

Desde el punto de vista civil, la condena implica que el autor del crimen deberá indemnizar a cinco familiares de las víctimas con 150.000 euros, además de 325.000 euros a su primo, segando un camino difícil hacia la recuperación emocional y financiera para las familias afectadas. Cabe recordar que esta sentencia aún puede ser apelada ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, lo que podría dar un giro más a este dramático caso que refleja la complejidad de la violencia y la salud mental en nuestras comunidades.