Un hombre ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Pontevedra a dos años de prisión y a abonar una multa de 1.746 euros tras ser detenido por la Guardia Civil en Vilanova de Arousa. Este individuo fue interceptado mientras transportaba anfetaminas y heroína en su vehículo, lo que ha llevado a las autoridades a clasificar su acción como un delito grave contra la salud pública.

El fallo judicial establece que el acusado cometió una infracción en la que la posesión de estas sustancias estaba destinada al tráfico, enfatizando el carácter perjudicial de las drogas involucradas. Se han considerado también factores agravantes en este caso, como la reincidencia del acusado, aunque se han contemplado atenuantes como las dilaciones indebidas en el proceso y su condición de drogadicto.

Los hechos ocurrieron en la noche del 28 de marzo de 2019, cuando, alrededor de las 21:25 horas, el procesado fue sorprendido por la Guardia Civil en la carretera PO-549, en el municipio de Vilanova de Arousa. La intervención policial reveló que el detenido transportaba las sustancias con la intención de comercializarlas, poniendo en riesgo la salud de posibles consumidores.

De acuerdo con la sentencia emitida, el vehículo del acusado estaba modificado para facilitar el ocultamiento de estupefacientes, con un compartimento diseñado específicamente para ese propósito, ubicado en el panel del asiento trasero, justo detrás del conductor. Este detalle resalta la premeditación del delito y la voluntad de eludir a las autoridades.

Asimismo, el tribunal ha estimado que el valor de las drogas interceptadas en el mercado negro ascendería a aproximadamente 873 euros, lo que pone de manifiesto la magnitud del tráfico de sustancias ilegales en la región. Es importante señalar que esta sentencia aún no es definitiva, ya que el condenado tiene la posibilidad de presentar un recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).