Una trágica explosión en un almacén pirotécnico ilegal en Pontevedra en mayo de 2018 causó dos muertes, decenas de heridos y gran devastación. Este jueves, el responsable ha sido condenado a 4 años de prisión tras aceptar su culpabilidad y pedir perdón ante la Audiencia Provincial de Pontevedra.

En la vista de conformidad, Francisco G.L. reconoció los hechos y expresó su arrepentimiento, recibiendo la pena mínima permitida tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía para rebajar la solicitud inicial de penas de 14 años de cárcel a 4 años efectivos.

El acusado no contestó a la pregunta de la representación de una de las partes acusadoras, y se le imputan dos delitos de homicidio imprudente, 28 de lesiones por imprudencia y 3 de dedicarse a la pirotecnia de manera contraventora, poniendo en riesgo la vida y la integridad de las personas.

La controversia actualmente se centra en la responsabilidad civil y si se aplica el límite de la cantidad de un millón y medio de euros acordada con la aseguradora del acusado, Mapfre. La explosión dejó dos muertos, 36 heridos, y causó daños a 430 viviendas y 76 vehículos.

La asociación de afectados de Paramos espera cerrar este capítulo doloroso con el juicio y la condena del responsable, agradeciendo su disculpa aunque consideren que llega tarde. Anhelan poder avanzar y dejar atrás este trágico suceso.

El proceso judicial ha avanzado, las viviendas han sido restauradas y las compensaciones pendientes se resolverán próximamente. La asociación y la Administración reclaman indemnizaciones para cubrir los daños sufridos por las víctimas y financiados previamente por el Estado.

El abogado del acusado argumenta que la aseguradora debe asumir la totalidad de los daños, ya que el seguro obligatorio debe cubrir las indemnizaciones sin limitaciones contractuales, considerando insuficientes los límites establecidos en la póliza.