El BNG, en su informe de gestión elaborado con motivo de la XVIII Asamblea Nacional, presenta un enfoque renovado y firme hacia la defensa y promoción del idioma gallego. Entre las propuestas, destaca la necesidad de implementar políticas de inmersión lingüística, fomentar un enfoque propositivo en el ámbito legislativo y brindar apoyo a las iniciativas populares que buscan revitalizar el uso del gallego.

En Santiago de Compostela, el 21 de noviembre, se dio a conocer que el Consello Nacional del BNG reconoce la imperiosa necesidad de "acción social" y "compromiso" con la lengua gallega, señalando una carencia histórica en la atención y dinamismo que este asunto merece por parte de la formación. Esta visión emerge de un análisis reflexivo que pone de manifiesto la actual situación crítica del gallego, evidenciada por los datos del Instituto Nacional de Estadística (IGE), que revelan un uso del idioma en cifras alarmantemente bajas. Para el BNG, esta es una “emergencia lingüística extrema”, y su documento sostiene que es posible revertir esta tendencia, siempre que haya una movilización colectiva y un compromiso político fuerte.

La defensa del idioma gallego también ocupa un lugar central en la tesis política que se discutirá durante la asamblea. El texto propone que la promoción del gallego sea una prioridad en las acciones del BNG, subrayando la necesidad de "robustecer e intensificar aún más el compromiso activo” hacia el idioma tanto en el ámbito social como en el político y el institucional. El partido enfatiza que no se debe caer en rutinas, sino que la eficacia de los mensajes y las campañas debe ser importante para alcanzar los objetivos de normalización lingüística.

Asimismo, el documento califica como "urgente y prioritaria" la necesidad de una defensa activa del gallego en un contexto dominado por políticas restrictivas promovidas por el PP, que, según el BNG, han tenido un impacto negativo en la lengua gallega. En este sentido, se alega que el Partido Popular ha mostrado una clara tendencia a utilizar los recursos públicos de una manera que perjudica a la lengua propia de Galicia, posicionándose como el principal obstáculo en el camino hacia su normalización.

El BNG señala que es imperativo articular un discurso que inspire orgullo y autoestima en torno a la lengua gallega, reconociendo su defensa como una causa justa que promueve la cohesión social y el desarrollo integral de Galicia. Para alcanzar estos objetivos, se subraya la urgencia de crear e impulsar espacios e iniciativas de inmersión lingüística que surjan desde todas las esferas sociales e institucionales.

En lo relativo al aspecto social y político, el partido llama a respaldar todas las iniciativas populares que trabajen para revitalizar el gallego y propone un enfoque propositivo en el plano legislativo. Esto incluye la formulación de una nueva ley de normalización lingüística, la actualización efectiva del plan general de normalización lingüística y la creación de un nuevo decreto educativo que reemplace la normativa vigente de 2010.

En su análisis, el BNG destaca que la defensa del gallego debe ser un pilar en su labor política, ubicándola como uno de los tres principales focos en los que deben concentrar su atención. La militancia del BNG tiene un papel fundamental en la acción de defender los derechos lingüísticos y avanzar en la normalización del idioma, asegurando la calidad de su uso y promoviendo la recuperación de los nombres y apellidos gallegos.

El BNG también identifica un ámbito simbólico que es crucial fortalecer, dado que percibe que el "españolismo" ha implementado una estrategia de expansión de sus símbolos, lo que requiere que se desarrolle una táctica propia que conecte la identidad de la sociedad gallega con su patrimonio simbólico. Finalmente, el partido enfatiza la importancia de la juventud, considerando a Galiza Nova como una referencia vital para el presente y futuro del movimiento nacionalista gallego.